Melancolía de Noviembre
Los días se acortan, el cielo permanece gris: a veces nos resulta difícil encontrar nuestro sol interior. Estudios científicos muestran que menos luz conduce a niveles más bajos de serotonina (nuestra "hormona de la felicidad") y afecta nuestro estado de ánimo.
¿Pero qué hacer cuando el cielo está nublado y aún queremos sentirnos libres y fuertes?
Colores que inspiran
La psicología del color demuestra que los colores pueden hacer mucho más que simplemente lucir bien. Influyen en nuestros sentimientos e incluso en nuestras respuestas físicas. Un amarillo soleado evoca recuerdos del último verano, un rosa o naranja intenso acelera nuestro pulso. Esto significa que con un poco de color en nuestra vida cotidiana, nos sentiremos un poco mejor al instante.
En un torbellino de colores
Un toque de color puede hacer maravillas, tanto para nuestro propio ánimo como para el de las personas que nos rodean. Especialmente en los meses más grises, el color es una declaración de optimismo y autoestima que atrae todas las miradas. Un rojo vibrante te llenará de confianza y pasión. El naranja envía una corriente de energía y alegría. Con un amarillo soleado, esparcirás buen humor y optimismo, mientras que un azul calmante te aportará claridad y hará que olvides el estrés diario.
No solo lucir bien, sino también sentirse bien:
Siente el poder de los colores. Haz una declaración que mejore el ánimo de todos.